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El entorno, salpicado por casitas de adobe, con ropa tendida al sol y el humo de nuestra cocina que se dispersa sobre el azul intenso del cielo, invita a una caminata acompañado con las llamas por la Quebrada de Humahuaca. El baquiano de la zona acompaña gentilmente al visitante para conocer el lugar y las fincas. Los más animosos podrán llegar caminando al cerro de La Rosa, que invade la vista, en una travesía hasta Maimará visitando las dos costas del río, y desde allí visitar nuestra finca donde deshidratamos verduras y hortalizas con energía solar. En nuestro lugar elaboramos una ricas sopas andinas como la sopa de Piedra.
Para adquirir un paquete de actividades y experiencia puede hacer su reserva enviando la solicitud, la fecha que desea y el servicio a comunidadomaguaca@gmail.com
La experiencia: Saliendo desde la Posta de Hornillos, pasando por la comunidad de Cieneguillas, tomamos el recorrido del Rio Grande, por la entrada sur de Maimara recorrido iniciando la caminata por la casa EcoSustentable del IPAF donde hacemos una ofrenda y pedimos permiso y bendiciones a la Pachamama. En el inicio de la caminata cada visitante recolecta una piedra con ciertas características, piedra macho tiene que ser, sin rajas o marcas, con las características para poder echarla al fuego y que no se parta, ella nos acompañará toda la caminata, a la manera de los antiguos la piedra representa una ofrenda que llevaremos hasta la apacheta para depositarla y entregar nuestra ofrenda y oración a la Pacha Mama.
El recorrido nos lleva hasta la naciente del Cerro La Rosa, pasando por el camino de conexión a los viñedos de Cieneguillas y Maimara, hasta el mirador de la Paleta del Pintor desde donde podemos tener una vista del valle y la Quebrada de Humahuaca. Hablaremos de la cultura andina, su cosmovisión, la producción agrícola, la molienda del maíz base esencial para la sopa de la Calapurca, la sopa de Piedra, la influencia de la gastronomía española, y su impacto en la región.
Se les explica a los visitantes como se preparaba el maíz desde su cosecha hasta su integración en la gastronomía andina, hablamos de los tiempos de cosecha y su relación con el calendario cultural, recorreremos emprendimientos de productores verduras, hortalizas, viñedos y entenderemos los procesos del deshidratado con energía solar, quienes y como dan valor agregado a su producción y a través de comercio justo comercializan una línea de productos deshidratados.
El Menú!! degustaremos unos escabeches de morrones, ajo y berenjena deshidratados con energía solar en pan de campo, empanadas de carne cortado a cuchillo y empanada de queso, cebolla y quinoa, la Sopa de Calapurca servida con crocantes chorizos criollo, pavita a la estaca con verduras ahumadas asadas en disco de arado con salsa chutney de locoto, estaca de tomate cherry, queso de cabra, rúcula y crouton de bollo casero en vinagreta de aceto balsámico, oliva y miel y de postre frutas quemadas en licor de muña, miel de albahaca y crocante de quinoa.
Las empanadas son elaboradas por la doña de la casa, al modo de taller donde los visitantes pueden participar y aprender su elaboración. Degustaremos y acompañaremos el almuerzo de campo con jugos y una copa de vino de la región.
Para aprovechar el día de la mejor forma la actividad debe iniciar a las 9:00 am transportándonos en vehículo desde la puerta de su hotel, donde están alojados, hasta el inicio de la travesía, almuerzo a partir de las 12:00 pm, y a las 14:00 hs los devolvemos al hotel. Por lo general las travesías a pie o en caravana de llamas son de menos de 1 y 1/2 horas de caminata sin grandes exigencias físicas por parajes y quebradas de montañas de colores, incluyendo un recuerdo de la actividad en la que participemos.
La comunidad Maimara, esta integrada en su totalidad por grupos de agricultores que trabajan en sus parcelas familiares, produce especialmente maíz, papas y habas, entre otras variedades de cultivos. Las puertas de las casas se abren para recibir a visitantes que quieran experimentar un turismo rural quebradeño.
Los anfitriones! Francisco y Raquel, trajinando en la cocina donde relucen los fogones sobre la estructura del noble adobe, marca registrada de cualquier casa de la quebrada. Con distintas ollas y un viejo caldero de barro que acusa varias campañas, se cocina el cabrito que formará parte del sustancioso menú.
Desde muy temprano en la mañana comenzamos a moler el maíz, base esencial de la calapurca, una sopa de origen quechua cuya receta, que mostraremos el paso a paso, Raquel ha heredado de sus ancestros y como una ceremonia seguimos con atención.
La Sopa de Piedra es parte de la tradición de las comunidades y se sirve especialmente en festividades. Mientras Francisco, entretiene con información de la región, cuida el fuego donde se calientan las piedras previamente seleccionadas por los visitantes en el Apu sagrado, último toque de la receta y su parte más sorprendente.
Con la mirada fija en la olla principal, donde ya burbujea el espeso caldo con sus ingredientes a punto, la cocinera saca de entre las llamas las piedras calientes y las introduce en la sopa. La superficie se llena de grandes ampollas y anuncia que el plato está listo para ser servido en rústicos cuencos y degustado en el sencillo comedor, sobre un mantel de impecable aguayo, en compañía de toda la familia.